Amanda Miguel Feliz en la música, comprometida en el amor

Por; Elcie Gonzalez para People Music

Con su emblemática melena, revuelta y risada y en medio de un espectáculo que se caracterizó por la energía y la pasión que imprime siempre a sus interpretaciones, la cantante Amanda Miguel se presentó este fin de semana, ante el público puertorriqueño en la Sala de Conciertos del Centro de Bellas Artes de Santurce, dejando muy claro, que continua siendo una de las intérpretes favoritas en el gusto y en el corazón de los boricuas y de sus fanáticos. De ello dio fe, el hecho de que prácticamente la mayoría de sus canciones, fueron seguidas y tarareadas, casi por completo, por todos los presentes.
Esta vuelta de la reconocida cantautora a la Isla del Encanto, forma parte de la gira de promoción de su nuevo disco ’80-15’ que incluye canciones inéditas y éxitos de la artista y que ha sido producido por su también, famoso marido, Diego Verdaguer quien esta noche acompañó a su esposa en hermoso dueto, durante un breve, pero emotivo intervalo, y luego, como solista, rememoró alguna de sus melodías.
El programa de esta vibrante noche, en que la artista fue acompañada excepcional y magistralmente por músicos y bailarines puertorriqueños, deslumbró durante toda la velada, por la sonoridad y el colorido, y en medio de ello, una Amanda que brillo por su poderosa y matizada voz, sobre todo, en aquellas canciones que años atrás la dieron a conocer en todo el mundo: “Así no te amara jamás”, “Como un Títere,” “El Gato”, “Hagamos un trato”, “Volveré,” “Pequeñas Cosas”, “Ámame una vez más” “Ya lo Sabías”, “Siempre te amaré” y por supuesto, su inolvidable, “El me mintió”, junto a algunos números inéditos como “Vaya pedazo de rey”.

El Show que comenzó apenas, ya pasadas las 8 y media, abrió con una sonora y fuerte interpretación a ritmo de rock acústico, en la que se evidenció una vez más la versatilidad musical de la artista, enfundada en un largo traje negro y azul y con su abundante melena, imagen que la ha caracterizado invariablemente, a lo largo de su trayectoria artística. Luego, las interpretaciones se ciñeron más a su estilo: intensas melodías que tocan sentimientos profundos, situaciones desgarradoras, mujeres enamoradas, abandonadas y ladronas de amores, hombres olvidadizos, mentirosos y traicioneros, amigas, tratos y ladronas de amor en la voz profunda e intensa de la artista.

Aunque esta vez, nos sorprendió al inicio una Amanda silenciosa, durante sus primeras interpretaciones, luego de la tercera canción, la cantautora reabrió un diálogo ameno, simpático y jocoso con el público que ya no pararía hasta el final de la noche. “Buenas noches, ¡qué público más lindo!, “exclamó emocionada la artista y luego, al escuchar el cerrado aplauso del público; “Gracias, me lo dieron con mucho amor.” “Muchas Gracias….ustedes me llenan de amor y de energía,” acotó con su habitual naturalidad y sencillez.

Luego, al terminar “Ya lo Sabias,” y bajo el agasajo cerrado del público, exclamó: “Gracias, Siempre en mi corazón, Siempre…”. “Y qué bueno que la vida me trajo para acá. Espero no tardarme tanto la próxima vez, porque de repente todo se hace largo; todo se hace corto… ustedes ¿qué creen, eh?” preguntó con picardía, mientras el público estallaba en carcajadas. “Bueno, ustedes ¿en que están pensando?…, yo estoy pensando en el tiempo…” prosiguió mientras la risa continuaba.

En otro de esos intervalos, en franca conversación con el público, la artista reafirmó su pasión por la música y lo que esta representa para su vida: “A mí la música me lleva por todos lados, y me permite sentirme del país donde esté. Ahora por ejemplo, soy puertorriqueña… La verdad si,… pude haber sido puertorriqueña…, chilena. Soy argentina de la Patagonia, si saben ¿verdad?… Un lugar precioso y me encanta.” Posteriormente y ante la exclamación de alguien que le interpelaba todo el tiempo desde el auditorio: “Me encanta su pelo,” la artista, aseguro: “A mí también me encanta mi pelo. Me encanta como soy, lo que hago. Disfruto como soy y lo amo.”

La ocasión fue propicia para que la cantante, anunciara al hombre de su vida: Diego Verdaguer, con el cual dijo estar casada desde hace 40 años y compartió con el público la feliz noticia de su reciente matrimonio por la iglesia. “Hemos estado casados por lo civil, pero decidimos hacerlo ahora por la iglesia: “Anímense, chicos, aconsejó divertida, es bueno, es divino”. Mientras el público le regalaba otro de sus sonoros y frecuentes aplausos.

Al final de la noche, y ataviada para esta ocasión con conjunto de pantalón y blusa negros, la artista interpretó dramáticamente, “EL me mintió”, atrapando su melena en cada giro, con gestualidad acentuada y la música como fondo, enmarcando su figura en una sensual despedida.