Mónica Puig recibe calurosa bienvenida

Por: Chayanne Mata para People Music

Desde tempranas horas de la tarde personas de todas partes de la Isla se dieron cita en el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín, para recibir a la medallista de oro, Mónica Puig. La tenista pisó suelo boricua a poco más de las 5:00 p.m. y fue recibida por el gobernador, Alejandro García Padilla, quien a su vez estuvo acompañado de la primera dama, Wilma Pastrana.

La deportista fue escoltada por el primer ejecutivo hasta el Salón de Gobernadores, ubicado en las instalaciones del aeropuerto, donde esta atendió preguntas de la prensa. De igual forma, Puig sostuvo constantemente que la medalla olímpica que ganó es para Puerto Rico y que seguirá representando al país en todo momento.

“Yo creía que era tiempo de enseñarle a todo el mundo dónde estaba Puerto Rico”, sostuvo la tenista mientras hablaba de su triunfo. Asimismo, expresó que el logro que obtuvo no la hará cambiar su forma de ser “Yo soy la misma persona, no pienso cambiar en nada. Llegué como soy y no pienso cambiar”, declaró. De igual manera, esta detalló que lo primero que desea hacer luego de su llegada es descansar y comer arroz con salchichas preparado por su abuela.

Mientras se daba la conferencia de prensa, cientos de personas aguardaban cerca de la puerta por donde se determinó era el trayecto de salida de Puig del aeropuerto. Quienes esperaban por la tenista, para demostrarle su agradecimiento y sentido de orgullo, entonaron más de una vez La Borinqueña. Cada vez que la mencionada puerta abría, el público gritaba al pensar que verían a la ahora denominada ‘’Niña de Oro’’.

Gritos, aplausos y decenas de banderas ondeando fue lo que observó Puig cuando tuvo de frente al público que aguardaba por ella. Esta saludó a todos los presentes y lanzó besos a diestra y siniestra, mientras era trasladada hasta el vehículo que la trasportaría al hotel donde pernoctará durante los próximos días. Durante el recorrido desde el aeropuerto al hotel un sinnúmero de personas, a lo largo de la avenida Baldorioty De Castro, la esperaban con pancartas, saludos y monoestrelladas. Durante el transcurso, ella se asomó por el “sunroof” y también saludó al pueblo que se lanzó a la calle. Incluso, personas estacionaron automóviles en el paseo para ver a la primera medallista de oro que ha tenido Puerto Rico.