Por Taína Vázquez Viera para People Music
Y así, por arte de magia, llegó la noche esperada. Su fanaticada, un público adulto que recordaba su juventud “Draconiana”, recibió con euforia la presencia poética y filosófica de Draco Rosa. Durante la noche del 21 de octubre de 2023 en el Coliseo José Miguel Agrelot, Draco Rosa presentó 40 años de carrera con un gran repertorio. Canciones que fueron, son y serán inolvidables.
Comenzando la noche con “Mama”, seguido de “Más y más” y “Penélope”, el público reaccionaba con gran exaltación nostálgica. “Mucha falta me hacía estar acá, con ustedes… puede ser que en Puerto Rico se apaguen muchas cosas pero ustedes, nosotros juntos, nah”, afirmando así la grandeza y resilencia de los puertorriqueños.
Bailando de alegría, vestido de capa y sombrero negro, Draco refuerza con una gran sonrisa: “Así me siento hoy”, brindándole al público parte de su esencia, entre luces y gráficas que aludían a la naturaleza, a la mujer, al espacio, a la vida. Continúa con los temas: “Dancing in the rain”, “Lie without a lover” y haciendo al público entrar en frenesí, con un distintivo y reconocido toque de batería la canción, “Cruzando puertas”.
En un escenario con tres grandes pantallas que acercaban al cantautor a la intimidad del espectador, con 14 músicos en el escenario, gráficas coloridas y su gran sonrisa, Draco nos relata sus comienzos en la agrupación popular Menudo, llamándoles “Temas de la época” y cantando: “If you are not there”, “Hold me” y “Cannonball”. Para sentir aún más la época, las pantallas proyectaban a un Draco adolescente y el público se transportaba a aquellos tiempos ochentosos donde la agrupación Menudo causaba una marcada euforia a nivel mundial.
“Originalmente quería ser arquitecto pero la música cambió el curso de mi destino”. Llevándonos por una gran travesía profesional y artística, Draco nos relata y explica sus comienzos con las colaboraciones más importantes de su carrera, las colaboraciones con Ricky Martín y Ednita Nazario. Deleitándonos con, “Más grande que grande” y “Tu sabes bien”, el público cantaba a todo pulmón. A esto le seguía “She’s all I ever had” y de repente los presentes ya estaban de pie y dando sus mejores movimientos con canciones como: “María”, “Copa”, “Vida loca” y la que considera su favorita, “La Bomba”, aquí sus mejores movimientos caribeños se hacían notar.
Se suaviza la energía presente y luego de un breve intermedio recibimos a un Draco vestido de blanco y acompañado por nuestro cuatro puertorriqueño. Aquí comienza el tema “Paraíso prometido” y se aprecia a un público contento y cantando con fuerza: “¡hay que llegar… hay que llegar…al paraíso prometido!”, casi como un mantra de vida. Esta canción da pie al comienzo de una serie de temas populares como lo son: “Como me acuerdo”, “Blanca mujer”, “ Quiero vivir”, “Esto es vida”, Madre Tierra”, “Amantes hasta el fin” y “Vagabundo”. Durante estos temas las imágenes proyectadas nos acercaban a memorias latentes y se apreciaba la cercanía de un tiempo pasado que marcaron un gran lapso de vida. Se percibía de manera abstracta la sensación de que el pasar del tiempo no es en vano y que la música siempre nos ha acompañado.
Mostrándose muy sincero frente a la realidad que vivimos, su postura acerca de la sinceridad y del proveer nuestras opiniones en un mundo sensible se hizo notar. Se mostró un Draco muy comunicativo, ofreciendo un espectáculo autobiográfico e interactivo. El poeta agradeció a su público y gratificó a todos los que allí se presentaron y llegaron desde diferentes partes del mundo y de la isla. “Han sido 40 años en esto y cada día es un nuevo comienzo”. Luego de más de dos horas de presentación, Draco culmina su concierto con los temas: “Cuando pasará” y “En las horas más tristes”.